1. Ponerse y quitarse las gafas con una sola mano alterará el equilibrio entre la montura y la derecha, provocando deformaciones. Se recomienda sujetar las patillas con ambas manos y quitárselas en direcciones paralelas a ambos lados de la mejilla.
2. Al colocarlo y quitarlo, generalmente doble primero la pata de la sien izquierda para evitar la deformación del marco.
3. Se recomienda enjuagar las gafas con agua limpia y usar toallas de papel para absorber el agua. Luego, limpie las lentes con un paño especial para gafas. Sujete el alambre del borde de la montura a un lado del espejo y límpielas suavemente para evitar dañar la montura o las lentes por una fuerza excesiva.
4. Cuando no use gafas, envuélvalas con un paño y guárdelas en su estuche. Si las guarda temporalmente, coloque la parte convexa de las gafas hacia arriba para evitar que las lentes se rayen fácilmente. Evite el contacto con productos corrosivos como repelentes de insectos, productos de limpieza para inodoros, cosméticos, laca para el cabello, medicamentos, etc., y evite la exposición prolongada a la luz solar directa y a altas temperaturas (superiores a 60 °C). Esto puede causar el deterioro, la decoloración, etc. de las lentes y la montura.
5. Acuda regularmente a una clínica de cirugía plástica. La deformación de la montura puede sobrecargar la nariz y las orejas, y los lentes pueden aflojarse fácilmente.
6. No use gafas durante ejercicio intenso para evitar impactos fuertes que puedan romper las lentes y causar daños en los ojos y la cara. No use lentes desgastados para evitar que la dispersión de la luz cause pérdida de visión. No mire directamente al sol ni a una luz intensa y deslumbrante para evitar daños oculares.
7. Mantenimiento de las gafas de sol
Unas gafas de sol deslumbrantes te permiten estar activo bajo el sol, con total libertad. De hecho, las gafas de sol pueden bloquear la luz solar, pero no los daños de la contaminación, así que debes cuidarlas bien para no quedar mal.
De hecho, el cuidado de las gafas de sol es similar al de las gafas normales. Limpiarlas, doblarlas y guardarlas debe convertirse en un hábito. Sin embargo, las gafas de sol se quitan y se ponen con frecuencia, y si no se tiene cuidado, se rayan. Por lo tanto, hay algunos pequeños detalles que me gustaría recordarles: si las gafas de sol tienen manchas, no las toquen con las uñas, ya que es fácil rayarlas.
Cuando no se usan las gafas de sol, muchas personas las cuelgan de la cabeza, el cuello o el bolsillo. En ese momento, no se deben mover demasiado para evitar que se rompan o dañen. También se pueden guardar en el bolso. Se recomienda guardarlas primero en un estuche rígido y luego en el bolso para evitar que las lentes se dañen con llaves, peines, placas de cobre u otros objetos pequeños, o que se contaminen con lápiz labial u otros cosméticos. El paño de madera para gafas no se puede usar con fuerza; de lo contrario, la madera se desgastará. Las gafas de madera son muy ligeras y cómodas de usar, y no irritan el puente de la nariz.