La sala de pintura eléctrica de infrarrojo lejano, también conocida como sala de pintura infrarroja, es una nueva sala de pintura de ahorro de energía, alta eficiencia y respetuosa con el medio ambiente que reemplaza la antigua sala de pintura de combustible con deficiencias como contaminación ambiental, alto costo y baja seguridad.
Principio de funcionamiento de la cabina de pintura infrarroja
La cabina de pintura infrarroja es un tipo de cabina de pintura en aerosol que utiliza un dispositivo de calentamiento infrarrojo como portador de calor. Se puede clasificar en cabinas de baja, media y alta temperatura; los dispositivos de calentamiento infrarrojo se dividen en tubulares y de placa; y, según sus características infrarrojas, se pueden clasificar en tubos o placas calefactoras eléctricas infrarrojas comunes, y tubos o placas calefactoras eléctricas infrarrojas de carbono.
La sala de pintura infrarroja aprovecha al máximo las características de los rayos infrarrojos: reflectividad, permeabilidad y resonancia. Gracias a su alta reflectividad, estos se reflejan en todo el espacio, lo que permite que los objetos que se secan estén expuestos a la radiación infrarroja en cualquier momento. La permeabilidad de los rayos infrarrojos penetra eficazmente en la capa de pintura y permite un secado gradual desde la capa más interna hasta la capa más externa. La resonancia resuena y roza eficazmente con las moléculas de los objetos horneados, aumentando eficazmente la temperatura de secado y la temperatura de enlace, logrando así un secado rápido.
Los tubos o placas calefactoras eléctricas infrarrojas convencionales utilizan elementos calefactores metálicos como portadores de calor. Su eficiencia de conversión de calor eléctrico es de aproximadamente el 70 %, su eficiencia de conversión de radiación térmica eléctrica es de aproximadamente el 40 % y la intensidad de la radiación infrarroja es relativamente baja.
Las cabinas de pintura infrarrojas, populares actualmente en el mercado, utilizan principalmente tubos calefactores eléctricos de cuarzo infrarrojo de fibra de carbono como elementos calefactores. Estos tubos, utilizados como elementos calefactores, mejoran eficazmente el consumo energético, reduciendo la potencia de la cabina original de 40 a 60 kW a aproximadamente 24 a 30 kW, lo que reduce el consumo a la mitad y mejora considerablemente el efecto y la eficiencia del horneado de la pintura. Son muy populares entre los usuarios y se promocionan como productos estrella de las empresas de cabinas de pintura.