Las nuevas traviesas ferroviarias tipo III son el material básico para la construcción de vías ferroviarias y un material indispensable para las superestructuras ferroviarias.
La función de las nuevas traviesas ferroviarias Tipo III es fijar el ancho de vía, soportar la carga de peso de los rieles y los vehículos que pasan, distribuir la carga de presión de la vía de manera uniforme y transferirla a la plataforma de la carretera y mantener la línea estable y lisa.
Las nuevas traviesas ferroviarias tipo III, también llamadas traviesas de hormigón, están compuestas de hormigón y barras de acero, con un aspecto resistente y una larga vida útil.
Las traviesas de cemento se dividen en niveles I, II y III según su capacidad de carga. El tipo I se utiliza para vías de carga media o ligera; el tipo II, para vías pesadas y subpesadas; y el tipo III, para vías extrapesadas con rieles de 75 kg/m.